El truco para aumentar tu cotización sin tener que trabajar
Hay formas de poder completar los años de cotización sin necesidad de tener que buscar cualquier trabajo para poder realizar aportes
La ecuación es simple: cuanto más tiempo se haya aportado al sistema previsional, más se cobrará de pensión.
Pero hay casos en que esto no es posible: muchos trabajadores que están cerca de retirarse de la vida laboral de repente se quedan sin trabajo, u otros ven que llegan a los 65 años y no tienen los aportes suficientes para poder jubilarse.
Pero todos ellos tienen opciones para incrementar su cotización y poder acceder a una jubilación que no tenga tantos ahogos económicos.
Además cabe recordar que optar por una jubilación anticipada, excepto algunas circunstancias, no es una alternativa ventajosa, porque el recorte a la pensión es tan grande que solo puede ser interesante a quien tenga una fuente de ingresos alternativa.
Ante esas situaciones, hay dos caminos: uno es optar por el subsidio para mayores de 52 años que otorga el SEPE, y otra es suscribir alguno de los Convenios Especiales de la Seguridad Social.
El subsidio para mayores de 52 años
Con la primera opción, se puede acceder a una ayuda que les permite cotizar para la pensión y sin necesidad de tener que estar trabajando.
Es una prestación económica pensada para un colectivo de trabajadores que, por haber pasado los 50 años, tienen más dificultades para encontrar trabajo. Sin embargo, eso no quita que puedan estar empleados mientras reciben este subsidio.
Eso sí, el inconveniente es que es una ayuda escasa, que no llega a los 500 euros: más exactamente, su valor equivale al 80% del IPREM (Indicador Público de Renta de Efectos Múltiples), que actualmente se encuentra en los 480 euros mensuales.
Los convenios de la Seguridad Social
Veamos entonces los Convenios Especiales de la Seguridad Social. Para poder acceder a la jubilación sin necesidad de trabajar hace falta un período de cotización de al menos 15 años, de los que dos tienen que haber sido inmediatamente anteriores a la gestión de la pensión.
Para acceder a los Convenios Especiales de la Seguridad Social hacen falta 15 años de cotización
No todo el mundo puede acceder a estos convenios, sino determinados grupos de trabajadores, como los que se den de baja del régimen de la Seguridad Social y que no estén en otro sistema previsional.
También alcanza a los trabajadores por cuenta ajena indefinidos, los que sean por cuenta propia y formen parte del sistema de la Seguridad Social y tengan 65 años o más, los que estén como pluriempleados y dejen alguno de los trabajos, y los que obtengan un contrato por el que coticen menos que en el último año.
Además, pueden sumarse los que tengan una incapacidad permanente total que hayan vuelto a trabajar, los desempleados que hayan agotado la ayuda del SEPE y los pensionistas que reciban una prestación por incapacidad permanente parcial.
Y también cubre a los que han perdido su jubilación o la pensión de incapacidad permanente por una sentencia judicial o a las que la Seguridad Social les negó la jubilación.
De cuánto son las cuotas
Todas esas personas que quieran sumarse a los Convenios Especiales de la Seguridad Socialpueden aportar una cuota mensual para poder completar su cotización y llegar a una jubilación más holgada.
Entre ellos se encuentra el Convenio Especial de Regulación General, donde hay que demostrar que se cotizó un total de 1.080 días en los 12 años anteriores, y en el caso de los pensionistas que tengan una incapacidad tienen que acreditar 15 años de aportes.
Los trabajadores que tengan una cotización mínima de 960 euros deberán pagar 255,52 euros al mes, los que lleguen a los 2.000 euros tendrán que abonar 532 euros mensuales, y los que puedan tener una cotización máxima de 4.070 euros deben asumir una cuota de 1.101,16 euros mensuales.