Las aerolíneas de bajo coste transportaron 20 millones de pasajeros en los siete primeros meses del año, lo que supone un aumento del 9% respecto al mismo periodo del ejercicio anterior, acaparando el 49% del tráfico aéreo de pasajeros con origen o destino a España.
Las compañías tradicionales trasladaron a otros 20 millones de viajeros hasta julio, un 1% más que un año antes, captando el 50% del tráfico aéreo de pasajeros en los siete primeros meses. Destaca la expansión de las aerolíneas del grupo Iberia, cuyas franquicias (Iberia, Express y Air Nostrum) trasladaron a más de 11 millones de clientes.
En julio, las compañías de bajo coste aumentaron un 7% los viajeros, hasta superar los cuatro millones, el 50% del total del tráfico aéreo del mes, que repuntó a nivel global –sumando las aerolíneas low cost y tradicionales– un 5%, hasta los ocho millones de viajeros.
El 80% del flujo aéreo provino de la Unión Europea, con un aumento del 6%, frente al resto (20%), que experimentó un aumento del 2%.
Los mercados tradicionales
Por mercados, el Reino Unido e Italia lideran las entradas en compañías de bajo coste, con un 35% y un 12% de los pasajeros que eligieron este tipo de compañías, respectivamente, y crecimientos del 4% en el caso del mercado británico (7 millones de viajeros), y del 18% en el mercado italiano (2 millones).
Alemania, tercer emisor, aumentó un 11% las llegadas hasta los dos millones de viajeros, el equivalente al 11% del total de las entradas. La siguió Francia, con el 8% del total y un millón de pasajeros, un 19% más que hace un año.
Ryanair, easyJet y Vueling acaparan el 34% de los pasajeros que volaron en alguna compañía de bajo coste en julio y el 66% del total del flujo aéreo internacional recibido en España por esta vía. Las tres mostraron una evolución creciente, destacando un mes más el aumento de Vueling.