Al pan, pan,y al vino, vino. El ex presidente de la Asociación Empresarial Hotelera de Madrid (AEHM), Jesús Gatell, lo tiene claro: hay que hacerle la pelota al visitante en tiempos de crisis. “Estar a su lado, ganarse su confianza y entenderle”. En pocas palabras, el directivo aboga por “hacerle el amor al cliente” con el fin de de aumentar las ventas y fidelizar al consumidor.
De esta forma reivindica que sólo el “esfuerzo de verdad” diferenciará unas empresas de otras. Y ello será básico para determinar el futuro de las compañías. Sobre todo en un momento en el que el mercado minorista está en horas bajas, tal y como han explicado los directivos de las principales cadenas en el 35 Congreso de la Unión Nacional de Agencias de Viajes (UNAV), celebrado este martes en Madrid.
Menos lágrimas y más trabajo
“Ya no vendemos hoteles ni cruceros, sino emociones, sensaciones, un recuerdo, cosas del corazón”, asegura Gatell. Y para ello, “tenemos que dedicarle todo el tiempo del mundo a nuestro cliente”.
Gatell también ha defendido que la administración y los gobernantes tienden a intentar “salvarnos” cuando el empresario “no necesita subvenciones”. A su juicio, se requiere “un mercado para desarrollar conocimientos”. «Tenemos que dejar de llorar para dar paso al trabajo», ha sentenciado el hotelero con su sinceridad habitual.