La aerolínea de bajo coste irlandesa Ryanair registró en su primer trimestre fiscal, finalizado el pasado 30 de junio, un beneficio de 99 millones de euros, el 29% menos que en el mismo periodo de 2011 cuando alcanzó los 139 millones de euros.
La compañía incrementó su facturación en un 11%, hasta los 1.284 millones de euros, tras elevar su tráfico de pasajeros en un 6%, alcanzado así los 22,5 millones de viajeros transportados, frente a los 21,3 millones que registró durante entre abril y junio del año anterior.
Precio del combustible
En ese sentido, la aerolínea atribuyó la caída del beneficio a los mayores costes de combustible que acapararon el 47% de los gastos totales de operación de la low cost, aunque ha apuntado que esta repercusión se verá reducida en los próximos tres trimestres de su ejercicio fiscal.
A su vez, Ryanair incrementó durante el primer trimestre un 4% las tarifas de sus billetes, mientras que los costes unitarios ascendieron un 10% debido a un incremento del 27% en el precio del combustible.